Bueno, hacía bastante tiempo que no escribía en el blog. Realmente, estoy padeciendo lo que se puede calificar depresión post-Hillary. Siento un vacío extremo tras haber acabado con 'ella'. Ahora entiendo el sufrimiento que padecían tantos y tantos artistas, es tanta la pasión que le pones que cuando acabas sólo te queda la nada.
Para intentar salir de este abismo he dedicado las últimas 48 horas a la compra compulsiva de regalos de Navidad (ya veremos cómo gestiono mis maletas). También estoy sobrellevando este 'sinvivir' haciéndome a mi nuevo ordenador (el anterior empezó a darme problemas, así que me compré por internet un Mac). No había utilizado en mi vida un Mac, y está resultando un mundo del que cada día aprendo algo nuevo. Tener un Mac era el último paso que tenía que dar para mi total asimilación al mundo californiano. Bueno, sí, todavía me queda el neopreno y la tabla de surf. Dadme tiempo.
El sábado estaré ya en tierras catalanas. Mi viaje empezará a las 10 de la mañana del viernes en Santa Barbara, y finaliza a las 17.30 del sábado en Barcelona. Mi propósito inicial era encerrarme en el bar 'Manolo' dos días a comer berberechos, tortillas de patatas, patatas bravas, queso,... y entre tapa y tapa, una cucharada de Nocilla. La realidad me hace pensar que voy a llegar totalmente destrozada.
En fin, os dejo, estoy con Cartman, que me alegra infinitamente la existencia, y un dolor de cabeza que me acompaña en la última semana y que sospecho que tiene que ver con la disminución de mi dosis de Coca-Cola Light. O quizás sea parte de ese vacío... ay!!! van Gogh!!!! qué cerca de ti me siento!!!!
Próximo post: cómo me corté la oreja mientras miraba el Pacífico.