Hoy es Labour Day en EEUU. Me llama la atención que el día del trabajo se celebre aquí siempre el primer lunes de septiembre, pero por lo que he podido averigüar son varios los países los que lo celebran este día (concretamente, Bermuda y Canadá).
La universidad está cerrada pero aún así Guillermo ha ido a trabajar a su despacho. Yo me he quedado trabajando en casa. Como podeis ver no hay mucho que contar porque nuestra vida discurre 'encerrados' trabajando. Nuestro único contacto con el exterior es vía noticias de televisión o lectura de diarios. Y así me he enterado de una tradición norteamericana, que es que cuando comienza el curso escolar el mismísssimo Presidente de los Estados Unidos se dirige, en un discurso televisado, a los alumnos de primaria y secundaria. Pero este año es diferente, este año está Obama, el mismíssssimo demonio, por lo que muchos padres se han quejado de que el discurso del presidente pretende adoctrinar (en el socialismo?) a los niños y se han negado a que sus hijos atiendan al discurso presidencial (emitido en horario escolar, 9 am franja del Pacífico, la nuestra). Total, se ha montado un gran debate en torno a este discurso que tendrá lugar mañana. Pobre Obama.
La cuestión de la reforma del sistema de salud continúa generando agrios debates. En el council de Santa Barbara tuvo lugar una reunión la semana pasada y la verdad es que fue bastante pacífica y equilibrada, lo que dice mucho del talante de la zona donde vivimos. Cuesta mucho entender que haya gente que se oponga a esta reforma, más cuando te enteras de casos en los que las aseguradoras médicas han rescindido pólizas cuando sus asegurados han desarrollado un cáncer. Demencial, no?
Y bueno, el otro día recibimos el newsletter de Goleta, donde nos instan a comprar un kit de sobrevivencia para casos de emergencia. Los casos de emergencia de la zona son: incendios, terremotos y tsunamis. En las noticias locales informan de terremotos de baja densidad (4) en la zona pero yo aún no he notado nada. Los incendios están asolando la zona de Los Ángeles, Santa Barbara está tranquila. Y de tsunamis, poco puedo deciros, vivimos al lado de la playa y hasta el momento no he visto olas muy grandes, aunque ya avisan que este noviembre será intenso para los surfistas porque se prevé que llegue a nuestra costa los efectos de un nuevo 'El Niño'. Pero en el día de hoy nada se quema, no hay movimiento de edificios y las olas se mantienen dentro de su perímetro playero.
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